JUSTO ALDÚ

ADICCIÓN TECNOLÓGICA Y EDUCACIÓN

La tecnología ha transformado la sociedad contemporánea de manera irreversible, facilitando la comunicación, el acceso a la información y la automatización de tareas. Sin embargo, su uso desmesurado ha generado nuevos desafíos, entre ellos la adicción tecnológica, una problemática que afecta especialmente a los entornos educativos. En la actualidad, niños y adolescentes pasan incontables horas frente a pantallas, lo que impacta su capacidad de concentración, socialización y desarrollo cognitivo. Lo digo como especialista  en NNA. Este ensayo explora los efectos de la adicción tecnológica en la educación y las estrategias que especialistas proponen para mitigar sus consecuencias.

 

La Adicción Tecnológica: Un Fenómeno Creciente

La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha reconocido la adicción a la tecnología como un problema de salud pública, especialmente en el caso del \"trastorno por videojuegos\" incluido en la Clasificación Internacional de Enfermedades (CIE-11). Según estudios realizados por la Universidad de Harvard (2018), el uso excesivo de dispositivos digitales puede alterar las funciones cerebrales, generando cambios en el sistema de recompensa similares a los observados en adicciones a sustancias. En el contexto educativo, esto se traduce en una menor retención de información, problemas de atención y dificultades para desarrollar el pensamiento crítico.

En un informe del Instituto de Psicología de la Universidad de Buenos Aires (2021), se reveló que el 67% de los adolescentes pasan más de seis horas diarias en dispositivos electrónicos, lo que no solo afecta su rendimiento académico sino también sus habilidades interpersonales. Los expertos alertan sobre la relación entre la hiperconectividad y el aumento de los niveles de ansiedad, estrés y depresión en jóvenes.

 

Impacto en la Educación

Uno de los efectos más evidentes de la adicción tecnológica en la educación es la disminución de la capacidad de atención. Investigaciones del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) han demostrado que la atención promedio de un estudiante ha disminuido drásticamente en la última década, coincidiendo con el auge de los dispositivos móviles y las redes sociales. Además, los métodos tradicionales de enseñanza han tenido que adaptarse a un entorno donde la información rápida y fragmentada predomina sobre el análisis profundo y la reflexión crítica.

El psicólogo Jean Twenge (2017) señala que la generación actual, conocida como \"iGen\", muestra menor interés por la lectura prolongada y la resolución de problemas complejos, ya que está acostumbrada a la gratificación instantánea que ofrecen las plataformas digitales. Esto supone un reto para los docentes, quienes deben equilibrar el uso de la tecnología como herramienta pedagógica sin que esta se convierta en un factor distractor.

 

Estrategias para un Uso Responsable de la Tecnología

Yo soy de la opinión de que pesar de los riesgos, la tecnología también ofrece oportunidades valiosas para la educación. Es crucial que las instituciones diseñen programas de alfabetización digital que enseñen a los estudiantes a gestionar su tiempo de pantalla de manera responsable. Recuerdo haber leído Iniciativas como \"Screen Time\" de la Universidad de Stanford han demostrado que la implementación de tiempos de descanso digital mejora significativamente la concentración y el rendimiento académico.

Otra estrategia efectiva es el \"aprendizaje basado en proyectos\", una metodología que fomenta la investigación y el trabajo colaborativo fuera de las pantallas. Además, los especialistas recomiendan que los padres y docentes establezcan límites claros sobre el uso de dispositivos, promoviendo el contacto con la naturaleza y actividades que estimulen el desarrollo emocional y cognitivo.

 

Conclusión

La adicción tecnológica representa un desafío significativo para la educación en la sociedad contemporánea. Si bien la tecnología es una herramienta poderosa, su uso desmedido puede afectar la concentración, la socialización y el bienestar emocional de los estudiantes. Es fundamental que las instituciones educativas, los padres y los responsables de políticas públicas trabajen en conjunto para promover un uso equilibrado de la tecnología, asegurando que esta sea una aliada en la educación y no un obstáculo. Educar en la moderación y la reflexión es la clave para formar ciudadanos críticos y responsables en la era digital.

Como todos saben, en el 2010 diseñe un Proyecto de Enseñanza de Ajedrez para niños en Riesgo Social. El mismo fue puesto en ejecución en algunas escuelas de  Panamá, Argentina y Colombia con buenos resultados.

También organicé el Ier Torneo de Ajedrez en un albergue de Latinoamérica en el CAI AMADOR 2021 enseñándoles el juego ciencia a niños en contexto de riesgo social.

El proyecto es accesible y gratuito. La idea es enseñar a pensar y combatir la deserción escolar y criminalidad con herramientas lúdicas.

La era digital es importante pero enseñar a pensar es un deber para las futuras generaciones.

https://juliostoute.blogspot.com/2010/09/proyecto-de-ensenanza-de-ajedrez-para.html

 

JUSTO  ALDÚ

Panameño

Derechos reservados / marzo  2025.