Volví a escucharte por pocos segundos
tu voz, un susurro que me hizo temblar
no imaginas cuánto te extraño, mi amor
sin ti mis horas y días son solo un rumor
tus besos dejaron su huella en mi piel
como un fuego eterno, un dulce laurel
te extraño tanto que, sin darme cuenta
digo tu nombre con el alma abierta
mis noches se llenan de melancolía
con tus susurros escribo mis fantasías
el viento lleva mis palabras de amor
mi pecho grita tu nombre en alta voz
si un día regresas a aquel viejo sitio
te abrazaré sin miedo al precipicio
eres estrella que naufraga en mi cielo...