Cuento estrellas velando solitario
desde mi ventana aislada,
abierta, en celeste madrugada,
por el soniquete de mis lágrimas
pregonando austeras mi nostalgia.
¿ Te contaría yo mis pesadillas
en el confesionario de esta noche
su fueras tú la oyente sacerdote,
al declarar mi vida de rodillas. ?
Leo poemas viajando solitario
por un firmamento sin posada,
cerrado a mi imaginación forzada
por sentimientos, que en páginas manuscritas,
otros interpelaron a la vida
JOSE ANTONIO GARCIA CALVO