Pecado
Hoy me llega tu recuerdo
sobre el tapiz del ayer;
en una tela curtida
te dejo a ti mi querer.
¡Cómo te extraño, mi vida!,
pero no te puedo ver,
porque al mirarte los ojos
podría desfallecer.
Si tus manos yo tocara,
podría enloquecer,
y no podría apartarme
de tus besos sabor a miel.
¡Cómo quisiera abrazarte!
pero no lo puedo hacer;
jamás podría soltarte,
no me puedo contener.
Tan solo con ver tu rostro
podría comparecer;
ante tu voz y tu encanto,
me dejaría vencer.
Y sin pensarlo un segundo,
vendría el anochecer,
y pronto, al llegar la luna,
yo volvería a caer.
Por eso quiero dejarte
sobre el tapiz del ayer,
porque es tu boca pecado
que hoy no puedo tener.
Andrea Chica