QUISE HACER UN POEMA.
Y de repente quise hacer un Poema,
más las letras todas, se me cohibían
y la inspiración se me hizo problema.
Cuanto más pensaba, los versos huían.
Fue pasando la noche. Casi amanecía,
me fue insuficiente… hastío y desvelo,
y la inspiración…. Se me hizo agonía,
con la última estrella apagada en el cielo.
Quizás mi mente profanó tu belleza,
ante sortilegios de tanta hermosura
o fue tan empírica mi inútil sutileza,
ante la beldad galante de tu escultura.
Y mis versos cayeron ruborizados,
como las hojas caen ante el otoño,
y cual floresta de bosques marchitados,
el poema sin nacer… Murió sin retoño.
Y quedó en mí: Frustración y placer,
entre tachones labrados en el papel,
y tus encantos… Sacrílegos de mujer,
volaron de mi pluma, cual ágil corcel.
Atrevido y banal fue mi empirismo,
ansiando plasmar tan regia orografía,
pero entre férrea nostalgia y melancolía,
entendí: Esbozo y verso, no son lo mismo.
Autor: Víctor A. Arana.
(VÍCTOR SANTA ROSA.)
Marzo 6 del 2025.