Un canto a la mujer
es un canto a la vida,
entrega sin medida,
bondad, es su poder;
siempre sabe querer,
siempre comprometida
en sanar toda herida,
llenarnos de placer;
es templo a la ternura,
a la fecundidad
y a la abnegación;
la creación más pura,
que da felicidad:
oro es su corazón...