Día a día,
poco a poco,
Morir cada día,
migajas de la vida,
naufragado cada día.
Entre palabras,
entre letras,
libre.
Cada día,
cada día más cerca,
desfallecido por horas, por días.
En la vida,
sobreviviendo,
entre mis mil vidas.
El milagro de poder morir,
el milagro de seguir en la vida.
Morir en las aguas,
morir en el aire del viento.
Entre las paredes del cansado vivir,
entre letras que desahogan el hastío de vivir,
entre los milagros de llegar a la vida.
Entre los extraños días,
aún respiro.
Entre los caminos,
entre mis propios mundos,
entre el aire y la tierra, mi mundo,
mundo que se desmorona y aún anda.
Entre lo inexplicable de poder morir cada día,
entre lo irracional de seguir latiendo a pesar de todo.
Entre las palabras que corren,
entre mi mundo perdido,
aún me bulle la vida,
entre la muerte,
cada día.