Abajo del viejo sauce se quedó mi amor.
Brotando en las ramas mi ciclo de deseo.
La linterna de la vieja casa me llama a dormir sola de nuevo en mi habitación.
Llena de misterio se marchita; la ilusión de mis pasos torna mi huida blanca.
Flores marchitas,
La cera de las velas son mis lágrimas en la noche de tu partida.
Pequeños cristales rotos con el tiempo se hacen más y más pequeños.
Dejando mi sombra en el pasado, solo recuerdo mi reflejo.