Lentamente se aleja
de mi alma aquel amor,
me pierdo en el pavor,
la soledad que deja;
mi mente está perpleja
se hunde en el terror,
al sentir el dolor
de una herida ya vieja;
para ti no pasó,
fue una rauda aventura
sólo un fatuo querer;
para mí me quedó
de tu amor la ternura:
inmenso padecer...