Desnudos velos,
Despojado de todo.
Corazón que se libera,
Sin necesidad de mentiras.
Libres de todas las ataduras.
Cálido interior, despojado de todo,
libre alma desvestida de apariencias.
Un alma de niño, niño empalagoso,
ñoño corazón, alma caliente.
Niño que busca algo,
un bobo retrasado
algo que se fue.
Ingenuo tonto.
Candidez,
inocencia perdida,
A pesar de todo, algo,
algo queda, algo del ayer.
Debajo de la pesadez de la vida,
entre las mareas que me arrastraron,
restos de esa inocencia pura.
En la esperanza de crecer,
de crecer corazón de niño,
de borrar todo lo corrupto,
De seguir siendo corazón,
de ser simple, de ser tonto.
De no ser malicia a veces,
de no saber olvidar lo malo.
Solo un corazón debajo de todo,
Alma que sueña con ser transparente.
En el interior, todavía un soñador,
con algo de niño enamorado,
enamorado de los colores,
de las mariposas,
tan simplón,
tan tonto,
soñador,
niño,
restos,
anhelos,
miope alma,
que busca ángeles,
Y no quiere ver la realidad,
soñando con ser un poco niño,
debajo de más capas y capas de viejo.