Nunca había sido tan presa del deseo...
Del deseo de tenerte entre mis brazos,
Así como tu corriendome en tus arrebatos de euforia,
Enloqueciendo mi cuerpo y mente con cada uno de tus abrazos profundos
Estoy tan llena de ti
Qué no puedo pensar en desear a nadie más,
Tus ojos llenos de deseo y pasion
Alimentaban mi calor fugaz y tragado de ti,
Como puedes hacerme el amor tan perfectamente,
Mi carne es débil por el simple hecho de tu existencia,
Quisiera no desearte tanto,
Al punto de salir corriendo a buscarte solo por un beso,
Pero quiero calmar mi cuerpo,
Por que aunque clame tus caricias,
No puedo seguir siendo presa del deseo de ti.