UN GRAN AMOR.
Un gran amor que llega un día,
se marcha a veces sin aviso ni despedida,
como repentinamente se oscurece el día,
cuando cae preso de una bruma cernida.
Un amor por grande o pequeño:
Se mesura… No tanto por el tiempo,
si no por la herida que ha dejado dentro
o por el rostro ceñido, triste o risueño.
Es como el árbol que se ha erguido,
plantado espontaneo por naturaleza
y que por hacha criminal ha sido herido,
ostentándose propiedad, sin pertenencia.
Un gran amor a las nubes se asemeja,
hoy blancas, diáfanas como un ósculo
y bajo el cielo azul que aparente se aleja,
las sonroja el celaje, al morir el crepúsculo.
Autor: Víctor A. Arana.
(VÍCTOR SANTA ROSA.)
Marzo 17 del 2025.