De los barcos de la mar
del agua, tienes pasión
de la mañana.. del alba
de toda tripulación,
que hagan tus horas.. mágicas.
Y cedes ante el complot
de dar tu carne, tu alma
sin pensar que está tu cama
de soledad, avanzada
y carente de pasión.
Subes al barco, sin ancla
sin las velas ni el timón
creyendo que así el amor
vuelve a ti, con la esperanza.
Pero vas a la deriva
y tus sueños solo son
querer pensar que un bribón
hará, tus horas mas mágicas.
Que la luz que cede el sol
y que calienta la barca,
solo en ti, son ilusión
y cedes al polizón
pensando, que es de fragata
capitán y buen señor.
Y la magia de tus horas
se torna, en decadencia
aún así con obediencia
tiras amor por la borda
y despierta, así lo sueñas.
Que en la mar has encontrado
el amor que tanto esperas,
y abandonas en la tierra
al único que te ha amado
entre la magia que cuentas,
con las horas que se pasan
se ahoga toda esperanza
del amor, que en tierra espera.
Sube mujer a la barca
que las olas te dirán,
que tu amor no está en el mar
si no en tierra que está seca,
pero zarpas, pero sueñas
que quizás al navegar
ese amor, puedas hallar
entre tablas y entre cuerdas.
No busques luz en el faro
ni ilusión, que está mas cerca
la mentira y el engaño
que te muestren las estrellas.
Vete, a buscar ese amor
en esa barca de sueños,
y verás.. que está despierto
el desengaño mayor.
Zarpa mujer en la barca
con la magia de esas horas,
que en la mar, se queda toda
la ilusión que tanto buscas.
Cede tu carne y tu vida
a cualquier tripulación
y sueña, con ese amor
que antes que empieza, termina.
Aprovecha bien la brisa
que sin velas, ni timón
el amor de un polizón
siempre se va a la deriva.
Sueña mujer encontrar
el amor entre desgracia,
que tus horas y su magia
poco tienen que durar
y de nuevo, a la mañana
tus sueños verán final
y a la playa volverás,
sola.. desconsolada.
Porque el amor que olvidaste
te esperó, y de mañana
se marchó porque buscaste
un amor, entre piratas
y sola, vuelves en barca
con tus sueños de mentira
y las horas que son magia
ahora, son horas perdidas.
Vuelve mujer a zarpar
busca ese amor, otro día
sueña que son de verdad
esas promesas que hacías
recubiertas de mentiras.
Llora triste en soledad
recordando quien te quiso,
quien, perdiste por soñar
y que ahora ves perdido.
Tanto soñaste encontrar
un amor de marinero,
que no viste que el primero
te amaba en soledad,
y zarpó como sirena
y soñó, que era real
pero la cruel realidad
fue, distinta a la que espera,
sueña, otra vez con ceder
tu carne, buscando amor
que en tierra nadie te espera
quien te quiso, se marchó
buscando un amor de veras,
¡ quédate en Cartagena¡
con quien nunca te ayudó.