Entre copas de vino
con mucha platica y armonía,
mi pasión crece por ti
enormemente cada día.
En el seno de tu pecho
aguarda mi corazón,
palpitando fuertemente
irradiante de pasión.
Acariciando tu cuerpo
tu vestido voy despojando.
Como cual hermosa rosa eres,
tus pétalos voy apartando.
Acariciando tu cuerpo
voy perdiendo el sentido,
y mis manos sobrepasan
los limites prohibidos.
En el paraíso me siento
cada que estoy contigo.
Cada noche de velada
no queda en el olvido.