Recuerdos de Asgard, de hermana y hermano,
renuevan las fuerzas para este viaje
entre las brumas de un bajo pantano;
Nacken me protege, ningún lenguaje
que turbe sonidos, flores que cantan,
y la luz de luna cubre el paisaje.
Las nubes de oro que ya se levantan,
se van, se despiden de hija de Iona,
y dejan nieves que al lago amamantan,
mas vienen los rayos que el sol entona,
y el rojo horizonte que se dibuja
muestra los verdes de pampa bretona.
La simple misión que ordena y que empuja
posa mi barca en ribera azulada,
juncos y espinos de una blanca bruja,
y miedos antiguos de cuentos de hadas
son como lanzas que sangres anhelan,
labios se cortan con brisas heladas.
.....
Traigo el encargo de voces que vuelan
por tierras altas de vientos salvajes
donde los ojos de Freya nos velan..
Ver las especias para los corajes,
signos del cielo para un calendario,
y rezos que calmen los oleajes,
tensar el arco como Sagitario,
crear las pomadas de la belleza,
tallados de dolmen para un santuario,
trucos que crean pasión y pureza,
saber conducir el libre albedrío,
magia de Lilith, con delicadeza,
saber conjugar calor y rocío,
dar fantasías en almas perdidas,
y si hay amor, qué sea solo mío.
......
Miró una mirada, ojos con heridas,
creándose un frío de aliento eterno,
y una voz muy suave de bienvenida
me dijo, bien, serás blanca de invierno..
....................
(cont)
Jhet