Entre el mar y el cielo
No distingo el distante suelo
La tierra quedo enterrada solo en mis recuerdos
Hace ya un largo tiempo que no tengo un paradero
Naufragante en un desierto de la nada
Mis deseos no tienen sabores
Mis sueños carecen de colores
Una pagina sin escritura en ella
Blanca como la neblina que me sotierra
La última gota de tinta roja me acompaña
Y la pierdo deslizándose por mi mejilla al contemplar un lucero que se apaga al observar mi agonía