Primavera
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Con tus verdes y frescas camisolas
gozosos se despiertan los caminos;
las flores a la vera de los pinos
muestran el avatar de sus corolas.
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Del arroyo, las gráciles cabriolas
compiten con descaro con los trinos
de jóvenes cantares campesinos
sobre las inefables amapolas.
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De tu encanto me gusta ese presente
deseo de cambiar por vez primera
el gris, por un azul más elocuente
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que se mete en los ojos de cualquiera.
Tras largos meses de un gemir doliente
todo vuelve a la vida y se acelera.
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Y vistes la pradera
con el volar de alegres golondrinas
y el rumor de corrientes saltarinas.
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Fotografía y poema: Ramón Bonachi.