Despertó el poeta
con el corazón erguido,
para cantar sus versos
a quien tanto ha querido.
Despertó el poeta
entre sábanas blancas,
con luz de luna llena
y sueños y añoranzas.
Su canto es un poema
de notas que se elevan
hasta las altas cumbres
de los montes en vela.
Esperan que su pluma
cante la Buena Nueva,
de Cristo hecho Hombre
que lo ama y lo lleva.
Va hacia a lejanas tierras
que esperan sus amores,
donde en hojas de lino
describa sus colores.
Su vuelo ha empezado
con un largo recorrido,
hacia un nuevo continente
donde pondrá su nido.
Un nido hecho de ramas
y de flores de olivo
para acunar al ave
que animará su trino.
Entonará su canto
al son de arrullos nuevos,
que alegrarán las almas
y harán vida los sueños.
Despierto está el poeta,
su corazón rendido,
para cantarle versos
a Aquél que lo ha ungido.