Cuando muera, sin duda mi ser viajará en esos últimos latidos llenos de pensamientos eternos,
preparado para transformar mi energía vital y continuar el viaje infinito,
lleno de momentos junto a los carriles del universo,
rodeado de sensaciones puras y un amor eterno de sueños.
Me desconectaré, envuelto en tu esencia fluida,
en el viaje del todo, del cual formamos parte. Tú estás en mi espacio temporal, siempre cerca pase lo que pase,
expandiéndonos, relatados como uña y carne.