En el claro banco de la plaza
se aman los claros enamorados,
en la plaza hay Bancos oscuros
de oscuros mezquinos habitados.
Buenos días, ¿es aquí señor
un buen lugar para depositar?
Traigo un montón de claro amor
y muchas ganas claras de amar.
¿Por qué así, señor, me mira?
¿Es tan poco para depositar?
Caricias, mirada de clara dulzura
si usted quiere puedo agregar.
Tal vez esto es tan poco y raro,
¿qué más puedo depositar?
Veré en los bolsillos qué tengo,
qué más le puedo entregar.
Si le agrego un claro vuelo
y mucha clara libertad,
un claro y amante beso
¿cree usted que alcanzará?
Por favor, déjeme usted ver
cuántos abrazos he traído,
yo le quisiera ofrecer
más de lo que ha creído.
Aquí tiene y compruebe
mi excelente clara amistad,
también un claro gesto quede
en signo de clara igualdad.
¿No alcanza, dice, todavía?
Entonces, voy a depositar
toda esta clara alegría,
y un claro grito de equidad.
Claras ideas justas quiero dejar
con claros sueños de mucha paz
claras esperanzas para guardar
y claros deseos de solidaridad.
¿Cree señor que alcanza ahora?
¿Alguna claridad ha de faltar?
¿Aceptan claras simples poesías
como claro depósito a cuidar?
¿Cómo expresa usted señor?
¿Nada puedo aquí depositar?
¿Dice que en este lugar oscuro
sólo oscuridad puedo entregar?
R.E.F.©