¿Dónde estás?
Te busco, pero no te encuentro.
Apareces… desapareces.
Siempre es lo mismo.
Estoy cansada.
Cansada de tu falta de atención,
de tu falta de interés.
Y siempre… siempre es mi culpa.
¿Mi culpa? ¿O la de los demás?
¿Culpa de qué?
¿De que no tengamos una relación?
Pero eso… eso es culpa de los dos.
Estoy cansada.
Porque siempre es lo mismo.
Intento, intento,
pero nada fluye.
Y vos no ponés de tu parte.
Me agotás
de una manera que ni ves.
Porque siempre sos vos.
Porque sos egoísta,
porque sos narcisista.
No te das cuenta de cuánto me herís.
Me has herido.
Y lo seguís haciendo.
Me pregunto por qué me quedo…
y la respuesta es siempre la misma:
porque sos familia