En la reiteración de mi mente,
vive una interrogante...
la cual se afinca imperturbable,
con el resto de sombra que a ti pertenece.
Y al caer cada tarde
me resulta un concepto abstracto,
donde soy... y estás,
en un engranaje de repetición.
Es un blanco sombrío,
vulnerable a lo negro de mi destino...
entre mecanismos conectados a un gran vacío,
y la visión asimétrica de lo pasado...
Y así te extraño, en silencio,
hurgando en el fondo del pensamiento,
en lo ambiguo sin remedio,
y prisionero de un futuro sin tu aliento...