Tiritarán a mis pies
incandescentes recuerdos,
de un incierto y gris abismo
y morirán, sin quererlo
bajo las suelas de piel
a cada paso que piso.
Han de ser en mi camino
como destellos en sombras
los momentos recordados,
y han de borrarse aplastados
por la ilusión que germino,
en pisadas de zapatos.
No ha de ver mi vida freno
ni tropezón ni castigo,
por recuerdos que hayan sido
errores o impedimentos,
que tiriten en el suelo
al andar ese camino.
Que sea la luz mi esperanza
que sean mis pasos, motivo
mi ilusión, mis nuevas ganas
el andar, mi cometido
y los recuerdos que piso
solo sean añoranzas.
Que tiemble el suelo a mi paso
con ilusión renovada,
y el futuro que me aguarda
la fuerza que tanto ansío,
que ahora sea mi camino
esa vida que soñaba.