Tus ojos me iluminan,
tal cual faro marinero,
calmando las olas
que perturban mi sendero.
Tus dulces besos me llevan
al edén verdadero,
tu sonrisa me atrapa
con un amor sincero.
En tu cabello viajo
por el universo entero,
tus abrazos el puerto
para mi alma de viajero.
El calor de tu cuerpo,
el refugio que más quiero,
tu amor es la brújula
para este forastero.
Tu voz, mi tierra firme,
donde anclo mis anhelos,
si la vida es un viaje,
quiero ser siempre tu compañero.