Ese propósito de amarme a tu manera
es un desengaño más en mi vida,
te burlas de mí en cada tormentoso beso,
con tus agresivas caricias y arrebatos.
Eres una hembra febril,
que me lanza al vacío como un juguete
para devorarme, flaqueas
Me dejas, que tome de ti
los placeres ocultos que me brindas,
y la perversidad de tus carcajadas
suena con un eco vibrante
en cada bofetada
de tu cuerpo contra el mío.
¿Será que me haces más daño que bien?
Tus aromas están conmigo,
la lujuria ronda la casa buscándote,
deja de jugar y,
rompe este infortunio que nos consume.
Tus ojos al encontrarnos
me han besado antes que tus labios.
El frío merlot te dio el valor
y el bálsamo necesario
para que pierdas la cordura.
Me llamas: mi bebe,
ven a mí a beber de la pasión
que explota por ti.
Me dices: Mi Señor,
que mi esencia viaje contigo
que este sabor de la vendimia
te acompañe toda la travesía,
llévate mis efluvios,
que han marcado lo que es mío,
ve a esas lejanas montañas
que cuando amanezca extrañes
mis juegos y desplantes.
Aun así, fuiste mía
dormiste en la hamaca pensando
por qué tengo
¿esta furia reprimida contigo?
Soñaste los avernos más intensos
amaneciste sudorosa,
sabor a un pecado que jamás cometiste.