María Guadalupe Cruz Guerrero

Justicia

Justicia

 

Lo mío fue un acto de justicia,

muchas lunas sin tus labios.

 

Sólo claros recuerdos de tus ojos

y escasas promesas de encuentros.

 

Así, la esperanza aguardó por años,

largos años de espera...

 

Para que hasta hoy, se luciera la justicia,

que sin medida se puso a mano.

 

Justo con las ganas de ti

y el deseo de morder tus palabras,

devorando tu silencio,

convertido en un inesperado

ósculo robado... y dado.

 

¡Justo fue...!