Tras ocho años de ausencia
he vuelto a Tulum, del mar
del Caribe la excelencia,
y tengo que confesar
que, en mi opinión, ha perdido
buena parte de su encanto,
quizá es que yo he envejecido,
y no la disfruto tanto
como, cuando seducido
por la belleza del mar
turquesa y azul marino,
y el blanco y fino arenal
de su playa con palmeras,
escribí un largo poema*
que la ensalzaba de veras,
aun temiendo algún problema
con la ambición desmedida
y el excesivo turismo,
que ganan hoy la partida
y ya Tulum no es lo mismo.
Playas de público acceso
no quedan, hay clubs privados
que cobran cientos de pesos
de entrada y mínimo gasto
y, en paralelo a la mar,
han acotado con saña,
reduciendo a la mitad
la anchura libre de playa
y acomodando a su gusto,
en el recinto acotado,
tumbonas, camas incluso,
y mesas, por descontado.
entre las pocas palmeras
que en esa zona han quedado.
Resumiendo, a mi, de veras,
Tulum me ha decepcionado.
@ Xabier Abando, 16/04/2025