Me surgen en la mente,
los pasos incorpóreos de la amiga que se fué,
a los que borra la blanca nieve,
y una bruma espectral que hace callar la noche...
Pasos que provienen de un lugar donde nunca estuve,
no son de vuelta de vacaciones,
son pasos que caminan y se acuestan conmigo,
como un sueño inservible...
Es un sino incurable,
al cual sufro, son pasos que no llegan a encontrarse,
como un fuego que no encenderé,
lo que me circunda y nunca dice mi nombre...
¿Y qué hago entonces?
contigo a la que me ofrendo diariamente,
y que humanamente,
es un estado que da juego a la muerte...