A expensas de la partida,
la vida!
muerte es mi destino y soy.
Pues que hoy!
leo en la luna nacida,
dó anida
la sonrisa en paz mecida,
por fortuna poco esquiva.
No hay ocaso ni deriva,
en la vida que hoy anida.
Eligiendo el agua o vino,
camino
amplitudes siendo centro;
y dentro
fusión de olas en crisol.
Del sol,
la luz le recuerda el rol,
al fulgor de cada gota.
Con valor, no en suerte rota
camino dentro del sol.
Terca el agua, dulcemente
en fuente;
como prendidos nosotros
de otros,
somos sustento y placebo.
Y bebo,
todavía soy mancebo;
de todo el resto aprendiz,
ducho en nada, soy matiz;
pues en fuente de otros bebo.
318-omu G.S. (bcn-2011)