ALBA DE RESURRECCIÓN
La piedra rodó,
el sudario vacío
es ahora bandera.
El alba cantará,
se romperá el silencio
en un grito de luz.
Resucitó:
no en una tumba fría,
sino en el pan que partimos,
en el abrazo que sana,
en la semilla que estalla
bajo la tierra oscura.
Aleluya:
el domingo eterno
ha comenzado.
¡El Verbo es victoria!
Vivamos la Pascua con el corazón,
sintiendo su gracia y su bendición.
— LMML.