Mujer tu eres hija del arco iris y lluvia de fuego. Sabes tratar con sutileza los hilos del cuerpo y del placer. Te sueles mover por impulsos e instintos, pasando a ser esclava de tus propios nervios. Tienes la facultad de conquistar las almas, e invadir los cuerpos. Soplas las nubes instaladas en las cabezas. Eres como una moneda de cambio que viene y va. Tan pronto eres pradera fértil y árido y estéril desierto. Sabes guardar con buen tino en tu mochila, amores y cuentos. Sin vuestra existencia, estamos convencidos que la vida, no tendría razón de ser pues seguro estamos que estaría huérfana de amor.