Como gotas de lluvia qué se hilvanan
En el lienzo del silencio
Así rompe el viento un silbido al silencio
Y luego galopar de caballos desnudos
Al viento
O el aletear de palomas en fuga
Seduciendo al silencio
La armonía perfecta es el caer delicado
De gotas al río
O el correr incesante de cristales
Al viento
En tintinear aleteo de lágrimas
Que se lanzan al eco infinito
En una danza perfecta
En un abanico de cristales
Vibrantes al viento.