gartenis

Revoloteando en mis pensamientos

 

Colibrí, quédate quieto en mis tormentos,

déjame apreciar esas singulares alas.

Encuentro fugaz,

quédate un instante más.

Como un sol llegas, alumbras todo mi ser,

ningún temor encuentro en mí.

Gracias por aparecer,

solo te pido permanecer

un rato más, hasta que el día fenezca

y pueda verte revolotear.