JAVIER SOLIS

MI TESORO

Guardaré el aroma de la tarde

aquella en que asidos de las manos

vagamos por el viejo malecón

en un día de verano.

 

Guardaré el calor de tus manos

cuando nerviosamente cogió los míos

enlazando nuestros corazones

en promesas ideales.

 

Guardaré también tu sonrisa

esa que con disimulo

me prometía amarme por siempre

aunque el tiempo se borre

 

Guardaré la calidez de tus labios

que temerosa y llena de ternura

depositaste en los míos con sensualidad

dejando grabado en mi alma su sabor

 

Guardaré el sabor de tus besos

aquellos que sellaron las promesas

de un amor infinito

aquella tarde irreverente.

 

Quedará grabada en mi alma

la ternura de tus brazos

cuando ansiosa y confiada

prometiste amarme para siempre.

 

Lima, 22 de abril del 2025

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