Franjablanca

Otra ronda

Descanse en paz la pasión

que dejamos en barbecho

y nos sirve de lección

para echar a los hecho, pecho.

Vertamos en tierra hostil

la culpa a todos los males

y sembremos el jardín

de rosas como puñales.

Después de cicatrizar

al futuro con excusas,

apuesto en juegos de azar

desabrochando otras blusas.

Rellena tu copa y bebe;

yo pago, como buen sandio.

Me dices lo que se debe,

y quédate con el cambio.