Quiero tus secretos, quiero tus caricias,
siempre y en cada madrugada…
Tu piel se enciende en una danza,
juntos nos ocultamos de las sombras
y el placer de poder tener tus piernas
tan apretadas a mi cintura
me quita lo ecuánime de mi mente…
Tengo un puente mágico
entre tus muslos y mis besos,
mi abrazo se hizo eterno
incluso hasta cuando no te tengo…
Fuego audaz en tus ubres
que tiene escondido el arte
de la pasión desenfrenada;
entonces, cada sismo de tus huesos
revientan en mi estructura,
el tiempo se detiene y bebo de tí
tan nuevamente como en un principio…
Creo que tengo casi todos tus secretos,
tus mentiras y tus caricias,
renacemos cuando mueren las olas
y en el remanso de muchas playas
nuestro amor se hace invencible,
porque mi sueño eterno eres tú,
mi flor roja que nunca se marchita,
mi caminito colorido de brisa salada
y esas ganas de navegar;
así te amo, y no me iré sin tí,
así muero en este espacio sin fin.
©.