Testigo de Luna
La Luna ha sido injusta,
no me ha dejado dormir,
noche tras noche,
soñando tu sonrisa, tu caminar, imaginándote volar...
Preguntando a mi Dios bueno de amor
¿Cuál es tu misión?
Mostrando su belleza frente a mí, inmensa y brillante
agradecida, en ella veo tu reflejo en mí,
dos que somos uno, uno que somos todos.
Esto es así...
Hoy sé que, al salir el Sol,
curiosamente ella ocultará su luz,
la posará en tu corazón por siempre,
para siempre, es perfección.
Y en cada encuentro de amor,
entre la Luna y el Sol,
siempre vibrará tu corazón,
dejando huella de pie ante tu tesón.
Guerrero nato, de leal corazón,
perpleja de tanta belleza,
homenaje infinito ante tu amor.
Honor y gloria para ti,
gran Maestro, presencia de amor.
Con cariño para mi gran maestro
David Leal Guerrero – 06 marzo 2025