Antes de conocerla,
soñaba con ella...
Al encontrarla,
mi sueño se hizo realidad...
La amé,
la anhelé,
le abrí mi corazón...
Pero ella se marchó de la ciudad,
tirando mi amor a la basura,
Nunca contestaba mis mensajes,
nunca perdió el sueño por mí...
Intenté en vano olvidarla
en las sonrisas de otras mujeres...
No pude mentirme,
ella era la chica de mis sueños...
Oye, chica de mis sueños,
no me robes mi orgullo,
Oye, chica de mis sueños,
no dejes que mi amor se apague.
Rescaté mi amor del abandono,
me cegó una falsa esperanza,
perseguí su corazón fugaz,
solo para hallarlo latiendo fuerte...
Ella estaba viviendo su propio cuento de hadas,
un romance lejano,
en otra ciudad,
junto a otro hombre,
Ella se entregaba a otro hombre,
mientras yo me consumía por ella...
Oye, chica de mis sueños,
no me robes mi orgullo,
Oye, chica de mis sueños,
no dejes que mi amor se apague.
Perseguía a la futura esposa de otra persona,
un vaquero sin rumbo,
con guitarra en mano,
tejiendo palabras profundas en melodías vanas,
solo un cowboy solitario de medianoche,
cantándole al amor de otro hombre,
Oye, chica de mis sueños,
por favor, chica de mis sueños,
no me robes mi orgullo.