El beso absurdo
estallo en mil pedazos
rompiendo los moldes mentales
preestablecidos.
El furioso sentimiento
desbordo,como un rio acaudalado.
La baba chorreaba,contagiosa.
Las manos temblaban
y las piernas se doblaban
sin pòder soportar
el enorme peso.
Las palabras fluian,
incontenibles e incoherentes.
Y cuando el cuerpo
habia adquirido autonomia
escapandose de los designios mentales
ocurrio lo inevitable,el colapso,
el fin,la calma,la oscuridad,
el silencio,el desanimo.
Y asi,un guiñapo de carne y huesos
quedo tendido en un rincon
sumido en un desgano mortal.