Enmarca la tipica figura existencial
El zofrar del viento en mi ventana,
De un hombre sentado en el sofá
Despierto a las dos de la mañana
El vacío en la bodega de la barra
Llena el alma del individuo
Que con hocico sepulcral
Vierte su tiempo en el olvido
Tecleando los presuntos
Va de Becquer a Neruda,
Con prisa acude a Cernuda
Buscando asilo difunto
No ve en sus versos consuelo
ni en la lectura respuesta ninguna
sólo busca pasar el tiempo perdido
y afirmar con pena su pobre cultura