llegan con los ojos bien alunados
gritando que la noche esta oscura
con el volúmen de las colegialas.
llegan desarmando la brisa
contra la piel de las ansias
que se asoman ya desvestidas.
y no hay un beso que valga
sobre las mejillas manchadas,
la piel desgastada
y desaprendida de lágrimas.
no hay quien borre la lluvia
con una mano y ya desnuda
ponga sus bragas negras
sobre la candidez de la luna.
y las muchachas de praga
llegan con cuerpos llovidos
y con impacientes miradas
pintando arco iris nocturnos
con palabras acarameladas
sobre los más altos muros
de catorce suspiros...