Duerme el niño
sobre nubes de armiño,
silencioso y pálido
como la luz de la luna.
El niño sueña
un sueño profundo,
en el umbral de lo eterno
van sus pisadas,
una voz desde afuera
le dice: ¡detente!
No entres Juan Pablo,
no pises el túnel,
porque si lo pisas
no tendrás regreso,
familia y amigos
contigo contamos,
ven que aquì estamos
los que te amamos,
aquí te esperamos
ansiosos por verte,
felices...con fiesta
dichosos seremos,
a DIOS rezaremos...
todos cantando
las gracias dando,
por feliz encuentro.
Sal de las sombras
las que te aprisionan,
eres un valiente...
sigue tu lucha...
mis ruegos escucha...
abre tu mente
y hazte presente,
llega a la meta...
con ganas...con fuerza,
¡no desfallezcas!
Aquì en mi regazo
sentirás mis brazos
que te envolverán
en tiernos abrazos,
con cálido afecto.
¡Campeòn de la vida
contigo estaremos!
Felina