Hablábamos de nada como siempre,
yo no le entendía nada, como siempre,
yo le digo que la quiero, ella me cambia el tema,
ella me dice que lo quiere, yo le cambio el tema,
hemos pasado así varios días, meses, años,
mientras ella me pregunta si el amor es una fila india,
mientras canta y yo acompaño su voz con mi guitarra,
me pidió que escriba esta conversación,
yo le dije que estaba loca,
ella contesto que las mejores personas lo están,
en realidad me reí de ella,
me dio sus poemas para publicarlos aquí,
le deje mis consejos para que no llore mas,
le dije que yo quería escribir también,
le pedí que me enseñe,
ella me dijo que no sabía escribir,
que era lo que pensaba, lo que sentía,
se burlo de mi preguntándome si pensaba o sentía,
yo le dije que era mas fácil la guitarra,
ella me pidió una melodía para un poema,
yo le pedí su voz para la melodía,
ella a veces no puede escribir,
entonces yo escribo por ella,
mientras llora y sonríe en esa cama,
me pregunto qué hare cuando se vaya,
que hará cuando se vaya,
mientras lo digo llora y la abrazo,
y le repito que la quiero,
y vuelve al cuento de antes,
ambos sonreímos, se que perdió hace años el juicio,
y yo por seguirla lo perdí también,
ojala un día me escuche,
y dejemos de hablar de triángulos,
y dejemos esta conversación desigual.