Me escapo al rincón de los sueños
Donde los intensos mares
De la inconciencia penetran hondo
Y se sumergen los abruptos fantasmas
Y la noche es tan oscura y osada que
Repentino el cielo espantado
Llora lagrimas de mis sudores.
Me escapo por la puerta nocturna
Naufragando en los ríos de las alucinaciones
Y a galope sobre el camino andrajoso y sombrío
Me apresto para esquivar la horrible pesadilla
De mis noches inquietas...
Y despierto por mi grito horrorizado...
Mi cara húmeda y sobresaltada.