El potente reflejo declarecente
De el espejo oscuro de tus ojos
Tanto me dice como me calla
Y tanto me agoniza como me perpleja
Con placeres que la carne desconoce
Que ni siquiera el alma imaginaba
Tan deseosa tu mirada
Y yo ¿Que esperaba?
Pues de desde el inicio
Sabia cual seria la ultima linea de este poema
Desde que comenze a escribirlo
Sabia que era el unico problema
El problema de resolver lo irresolvible
Pues en este oceano de sentimientos sin nombre
No hay adjetivo que te describa
Que describa lo mentiroso de tus sonrisas
Como las promesas de aquel que gobierna
Que describa el dolor de tus caricias
Como fuego sobre las praderas
Que describa la desgraciada paradoja
De tus besos vacios
Pues podria ponerte mil nombres:
Muerte, Sangre, Carne y Tiempo
Azul y Fuego
Sentido y Desosiego
¡Oh! Mil nombres para darte
Pero ninguno que te complete
Ninguno que evite el final de la tristeza
Ni que permita al Sol
Salir de su corteza
Ninguno otro mas que con el que comenze:
Espejo