Corría de mis versos tu nombre, para que tu sombra no hiciese de las letras un reposo, sin embargo no tuve el valor para borrarte de cada línea y llego de nuevo tu recuerdo entre los versos de la noche.
Del tintero a la pluma y de esta al papel así viaja tu nombre en la mente demente de este hombre, quien viaja en el tiempo montado en recuerdos cual viajero de acaballo.
Le grite a tu nombre que no rondara mis sueños y este vino corriendo mientras dormía, me grite a mi mismo que no debía escribirte ni pensar en ti pero el olor a mar me recordó tu rostro, intente no estar dormido ni despierto para que no fueses real ni un sueño, pero aun estabas allí.
Versos mios de esta noche que hoy te nombran de nuevo, murmullo de boca grito de mi alma, alma que aun te busca, luz que no se apaga, sueño que no lo es, villa del amor, nombre de mar nuevamente y sin cesar hoy mis versos hablan de ti.