Bendita soledad, dulce compañera. Buena amiga, pero mala consejera, tu que generas amargura, tu que aclamas protestas, siempre tan callada, pero siempre tan alerta. Bendita soledad, tu que ardes en hoguera, odias mis recuerdos y ansias mi presencia. Porque siempre estas presente, y te niegas a reír, te encierras sin palabras, sin nada que decir, te quiero.. Si te quiero pero duele mi sentir. Bendita soledad, la llamada del amor llega, te espero de visita, mas no la vida entera, me gusta tu presencia pero asusta si te quedas. Quiero decirte amiga que la llama del amor no puede verse extinguida bajo ninguna condición, pues el amor es vida, el amor es pasión, es alegría, el amor es mi razón. Te agradezco bella dama, no posar en mi morada, no te quiero tan serquita, no te quiero como aliada.