Curiosamente
El sueño de la casa
Lo conseguí
Y al momento yo perdí mi dirección.
Pues esa casa la llevó un ventarrón
Y una familia a la sazón
Se fulminó.
Más era justo
Había muerto el amor.
Reconocí hidalgamente
Y me marché
Con mi maleta sin dolor.
Hay más dolor cuando lo buscas
Cuando no está en ningún balcón
Cuando no escucha tu canción.
Curiosamente
Es que lo dejas de buscar
Porque te quieres esconder
De esa fruta.
Siendo ermitaño
Lo que podría suceder
Es morir sin el amor
O encontrarlo en su justa dimensión.
Se ve bonito el paisaje
Desde mi gruta
Tengo también puestas de sol.
¿A que salir?
¿Para encontrar desilusión?
Si del amor se me consulta
Lo doy entero
Porque así soy.
Si no lo tengo no me hago una disputa
Y me sostengo
Con la oración.