***El Niño Poeta***
Escribe sus primeras letras,
que más bien son garabatos
que solo el corazón consigue
descifrar…
Sin que su pluma se detenga
a causa de la ortografía
que a cada momento le
pone zancadia…
El escribe sin pretensiones,
sin esas pasiones que despiertan
las envidias y las ambiciones.
Sin entender de dialéctica, teología
o filosofía…
Pues la inspiración la encuentra en
la alegría de la vida.
Su pluma es virgen en medio
de tantas ideas que ya se han
prostituido o diluido entre el montón.
Su léxico es sencillo y natural
sin las muletas del intelectual,
sin calcular o medir lo que quiere
decir… Porque cuando se habla
con la verdad está a la larga justifica.
No le espanta el sentido de perdida
o la muerte…
Pues para él, el tiempo es un concepto
inexistente…
No es su mente pista donde
bailan recuerdos recurrentes,
ni su alma gravita en océanos
de melancolía…
Porque en él hay plenitud y alegría.
Es su canto una alegoría que se vive
en el cielo desde que el sol y la luna,
un día de eclipse se juraron amor eterno.
Su mente carece del conocimiento
que dan los libros facultativos,
mas rebosa de la imaginación que
recibe en sus sueños furtivos…
Celebra a la mujer y al útero
que tras un sueño sideral
lo lanzo a la vida…
Agradece el cordón umbilical,
que lo unió, mas nunca lo ato.
Agradece la libertad en que
su madre lo pario…
Porque sabe que en una relación
simbiótica es imposible crecer
sin provocar que el otro mengue.
En él hay ese gracia de la ingenuidad,
que cree sin ver y siente sin tocar,
porque esa certeza no es algo que
comprenda la cabeza…
Es una seguridad que se aloja en
El corazón…
Pues el creador puse en su pecho,
un corazón de poeta.