PINONA

Alma en Calma

(Dentro del coche en una autovía; aumento la velocidad; conecto la música; subo el volumen y …)

 

Poco a poco, me pongo a cantar y

Cada nota se agarra, se engancha,

En todo rincón y avanza, sin tregua, sin pausa.

El cuerpo responde, los sentidos se colman,

Los sentimientos calan, y pierdo consciencia,

Hasta trascender mi alma.

 

La pena se aleja rauda hacia otro lugar.

Sensaciones de alegría y libertad,                          

Se enlazan y ensalzan de forma singular,

Anhelos permitidos,

Y al alma a volar se lanza.

 

Y siento el aire cálido de los vientos del sur

Que empujan mi alma,

Cual alondra que sacia,

Su hambre y su sed,

En campo de cereales de España.

 

Me agito, acepto y entonces me convierto,

En otra alma que alcanza su ser allá, en mi alma.

Presencia permanente, isla de dicha sin fronteras,

Que no entiende de lugar,

Y siento la templanza.  

 

Dos manos se enlazan, se aguantan,

Sublime contacto inmaterial.

Y entonces sonrío, me río,

Y siento el calor que llena mi ser,

Recorre mi cuerpo y atrapa mi alma.

 

Mi aceptación es una bendición

Que entrega mi alma,

Allá en los cielos, donde todo se calla y se guarda.

Libre, inmensa y feliz, se ensancha,

Atesora secretos que amplían su fin,

Su amor, su dicha y su calma.

 

MARTA DORESTE